Pontxo Hierbas//Divergente.info.- En los años cincuenta, en México inició un movimiento cinematográfico que, años más tarde, fue llamado cine de luchadores con El Santo como su mayor exponente.
Para el historiador y crítico de cine, Gustavo Trujillo, en México la lucha libre provocó un género cinematográfico, “a lo largo de cerca de 30 años, digamos de finales de los años 40 hasta entrados finales de los 70, hubo un personaje muy importante en el cine y en la lucha libre que era El Santo”.
Héroes de carne y hueso
El especialista en cine destaca que, a diferencia de todos los superhéroes norteamericanos como Batman y Superman, “El Santo si existió, era un personaje de carne y hueso, eso lo convirtió en un personaje completamente distinto”.
Los productores de esas películas siempre buscaron que tuviera un filo comercial que potenciara las utilidades de un género que era muy lucrativo en la República.
En esa época estas películas también se empezaron a exportar a otros países y como la lucha libre no era tan popular como lo era en México, inicialmente se hicieron versiones especiales de exportación, no se exhibían en México porque había una censura muy fuerte de parte del gobierno que tenía una alianza con el clero”.
Estas películas se mostraban en otros países y tenían un componente adicional pues había desnudos de las actrices que acompañaban a El Santo, “había escenas de un erotismo no permisible en México y un poco más liberal para algunos países”.
Peculiaridades del género
En estas películas existe una serie de formatos y valores que hacen del género de la lucha libre un género particular y eso es lo determina su falta de rigor técnico.
El cine de luchadores se caracteriza por tener elementos de películas ahora conocidas como serie B, con presupuesto reducido, actuaciones exageradas, historias surrealistas, tintes de cine negro y humor involuntario.
No se trata de hacer una película muy pulcra en el sentido técnico ni que tenga propuestas estéticas ni nada de esa naturaleza, se trata fundamentalmente de centrar la trama a partir del luchador y de los componentes que a veces pueden resultar incluso un poco ingenuos o infantiles, pero en eso estriba su encanto, en eso está fundamentado su valor”.
La identidad del héroe
Se calcula que en México se hicieron alrededor de 180 películas en este género de lucha libre, donde además de El Santo, estaban Blue Demon, Huracán Ramírez, la Tonina Jackson, Mil Máscaras, El Rayo de Jalisco, entre otros.
Destaca que solamente de El Santo llegaron a producirse cerca de 60 películas, en las cuales el enmascarado de plata se enfrentó a casi todo: mujeres vampiro, hombres lobo, invasores del espacio, monstruos, momias e incluso con la Llorona.
El Santo, lo mismo hizo películas de detectives, espías, westerns, ciencia ficción y terror fantástico, que lograron ser un éxito no solo en México, sino que, luego de varios años, se han convertido en películas de culto en Europa.
En lo que respecta a las películas de El Santo, quien era un personaje real, tenían la particularidad de la lucha de todos por descubrir quién era realmente, esos códigos que tenían las tramas, parte del hilo argumental era ver si en algún momento el luchador revelaba su identidad, si alguien le quitaba la máscara y se sabía quien era y lo identificaba.
Te compartimos la entrevista realizada a Gustavo Trujillo para el #SuperEspecial de Lucha Libre:
Guacarock del Santo – Botellita de Jerez
*No te pierdas los demás contenidos del Súperespecial de Lucha Libre Primera Caída.
